19 diciembre 2006

Feices Fiestas Para Todos :-)


La navidad es muchas cosas, demasiadas para tener el mal gusto de comentarlas en navidad. La fe, esa que se presuponía antes y ahora asombra al más pintado es algo que escapa a mi razón y sí, entiendo la paradoja; quiero decir que escapa de mí sin más, y en cierto modo es una pena. Por eso y por algunas cosas más la navidad en este desván es también y por encima de todo una excusa para desear el bien al prójimo, a todo buen hijo de vecino, al que no tiene vecino o hijo o padre y a todos los que salen en aquel anuncio de un refresco gaseoso registrado también.

Aunque no visiten este herrumbroso desván de pacotilla.

Para todos un rato para ser feliz, ya que estamos.


03 diciembre 2006

Quattrocento: Dos


Segundo capítulo del Quattrocento que me traigo entre manos (ya saben, aquello de los otomanos); cinco muestras de tres historias que tienen el buen gusto de estar terminadas, o casi. La imagen que encabeza la entrada es otra página de la historia que presenté otrora, una de esas tavernas del buen y del mal ver que coronan de cuando en cuando todo camino que se precie. A continuación dos dibujos del segundo cuento. Difícil explicar algo de él, que hablen las imágenes (sobretodo la primera, claro).



Y por último presentación y página eeeeehh tres de la tercera y poco autobiográfica historia, a pesar de tratarse de las peripecias de un dibujante moderadamente atractivo. Pero las coincidencias con mi vida acaban ahí más allá de las meramente logísticas informáticamente hablando, se lo aseguro. Y bueno, es posible, sólo posible, que mi pelea con el ser metódicamente ordenado que estoy seguro guardo en mi interior vaya camino de ser leyenda, y que por el momento y para largo la batalla se incline hacia el ser decididamente descuidado que estoy seguro aflora en mi exterior. Pero poco más. Y bueno, es probable, sólo probable, que yo también calce un 42 de los de ahora, un 41 de los de antes, pero eso, claro, sólo interesa a los fetichistas.